Home / Actualidad flamenca  / El cierre definitivo del tablao Villa Rosa

El cierre definitivo del tablao Villa Rosa

El mítico tablao Villa Rosa cesa su actividad de forma definitiva en Madrid tras ciento diez años de historia. Así lo ha confirmado en sus redes el bailaor Jonatan Miró, director artístico del tablao.


En verano de 2020 se alertó de la difícil situación de un espacio flamenco tan mítico como el Tablao Villa Rosa. «En peligro de extinción», titulamos por aquel entonces en el presente portal. Lamentablemente, los malos presagios se han cumplido y volvemos a tener que arrojar malas noticias sobre este local por el que han pasado las grandes figuras del flamenco desde 1920.

El bailaor Jonatan Miró, director artístico del tablao, ha sido el encargado de dar la fatídica información a través de sus redes sociales: el tablao Villa Rosa anuncia su cierre definitivo. «En apenas un mes se cumplirían diez años de esta nueva etapa en el tablao Villa Rosa de Madrid. Como sabéis, la pandemia está haciendo estragos en todos los sectores y mucho más en los tablaos flamencos, que se encuentran totalmente desprotegidos. Hoy tengo que comunicar que definitivamente el Tablao Villa Rosa cierra sus puertas», cita el bailaor en su cuenta oficial de Instagram.

«Han sido muchos los esfuerzos que Jesús Rodríguez, el empresario que lo ha estado regentando en estos últimos diez años, ha hecho para mantener el local, pero lamentablemente ha tomado la decisión y la determinación de tener que cerrar, puesto que lleva estos once meses manteniendo el local sin ingresos», continúa el artista.

 

«Nos despedimos así de este edificio ubicado en la madrileña Plaza Santa Ana, que ha liderado el arte jondo en la ciudad. Una obra de arte en términos arquitectónicos, que dejará de escuchar los ecos del taconeo, el cante, el toque y el baile»

 

 

Nos despedimos así de este edificio ubicado en la madrileña Plaza Santa Ana, y que ha contado con diferentes usos, siendo el flamenco su principal motor y liderando el arte jondo en la ciudad. Su estética se enmarca en los tradicionales teatros flamencos. Está rodeado por arcos apuntados –inspirados en la Alhambra– que sostienen todo un entramado de columnas y artesanado. Una obra de arte en términos arquitectónicos, que dejará de escuchar los ecos del taconeo, el cante, el toque y el baile.

En junio de 2020, Villa Rosa anunció un ERE a doce de sus dieciséis trabajadores. «Haciendo un esfuerzo he podido mantener a cuatro trabajadores, confiando en que llegaran ayudas a los tablaos, un sector tan importante para el desarrollo de artistas, la promoción y exhibición de un arte que en noviembre de 2010 fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Pero si esas ayudas no llegan, los tablaos moriremos, nos veremos obligados a echar el cierre definitivo», indicaba el propietario, Jesús Rodríguez Cerezal.

«Aun en el supuesto que en otoño y Navidad se diera una situación de relativa normalidad, luego vienen los meses de enero y febrero, que son deficitarios, así que no veo una puesta en marcha con regularidad hasta finales de marzo como mínimo», continuaba Rodríguez Cerezal en declaraciones recogidas por El País.

Los presagios de la Asociación de Tablaos Flamencos de España, ANTFES, presidida por Federico Escudero, también director general del famoso tablao madrileño Torres Bermejas, se han cumplido. «Voy a ser muy claro. Como no nos ayuden, los tablaos flamencos desaparecerán, y con ellos todo lo que les rodea», afirmó Escudero en el verano de 2020 con rotundidad.

Desde Expoflamenco enviamos todo nuestro apoyo a la familia del Tablao Villa Rosa y de todos aquellos espacios dedicados al arte jondo, que sufren las consecuencias de esta terrible crisis de la Covid-19.

Imagen superior: Facebook de Villa Rosa

 


Portal global de arte flamenco. El conocimiento y la pasión. La jondura y la pena. El pellizco y la fiesta. Patrimonio Cultural de la Humanidad.

NO COMMENTS

ESCRIBE TU COMENTARIO. Rellena los campos NOMBRE y EMAIL con datos reales. Para que se publique en nuestro portal, el comentario no puede ser anónimo.

X