La compañía EmiliOchandoYcía. presenta un nuevo proyecto de danza: 3DEUNO. En él se escenifican los tres estilos fundamentales de la danza española –Escuela Bolera, Folclore y Flamenco–, en una combinación novedosa desde el punto de vista técnico y estilístico. Se podrá disfrutar de la propuesta en el Festival de Jerez, en Sala Compañía, el jueves 1 de marzo a las 7 de la tarde.

 

– Decir Festival de Jerez es hablar de palabras mayores… ¿Cómo se siente ante la cita?

– Con mucha responsabilidad, ya que es mi primera vez. También tengo muchas ganas de poder mostrar mi trabajo y aportar mi visión sobre la danza española y el flamenco.

– ¿Qué tiene de especial Jerez para la presentación de 3DEUNO?

– Este espectáculo está enfocado en la danza española y el flamenco, en todas sus vertientes. Por eso creo que es importante que se muestren los estilos principales como la escuela bolera, el folclore y el flamenco con una visión actual sin dejar de lado, y respetando, la tradición. Jerez es una plaza importante para cumplir estos objetivos.

– ¿Qué podremos ver, por tanto, en la presentación en Sala Compañía?

– Pues mi intención es mostrar la diversidad de la danza española y el flamenco. Por eso cuento con un elenco de grandes profesionales tanto en la parte del baile –Carmen Angulo y Carmen Coy– como en la musical –Daniel Jurado y Makarines–. Todo conforma este 3DEUNO. Como sugiere el título, tocamos tres estilos diferentes en un mismo espectáculo, tres bailarines bailando el estilo en cuestión y tres músicos dando luz sonora al espectáculo.

– ¿Es usted más de mirar al pasado o más de mirar al futuro?

– Miro al futuro, pero sin dejar de pensar en el pasado. Nunca me olvido de dónde vengo y a dónde voy.

– ¿En qué estilo se siente más cómodo: danza, folclore, escuela bolera, flamenco?

– Puedo decir que en todos los estilos, porque cada uno de ellos me hace sentir diferente, me aportan sensaciones distintas y me las llevo a mi terreno, a mi forma de ver la danza.

– ¿Cómo se encuentra la danza de salud?

– Tiene un gran virus, y parece que no hay remedio para sanarla. Se debería pensar de otra manera cuando se ve o se dice danza, sobre todo respetarla más y hacerla más cercana para que todos puedan ver lo bueno que aporta y aportaría a esta sociedad que nos rodea.

– De sus orígenes, ¿qué recuerda como música de fondo?

– Pues recuerdo a mi abuelo escuchando a Miguel de Molina, Rafael Farina. A mi abuela con las coplas antiguas que cantaban trabajando. A mi madre con La vida breve, Las Bodas de Luis Alonso. A mi padre con Miguel Poveda, José Mercé…

– ¿Hay éxito sin sacrificio?

– Yo no concibo el éxito sin un trabajo detrás, sin un esfuerzo de más. Pero no lo llamaría sacrificio, ya que amo lo que hago y no me resulta sacrificado. Me supone obtener metas y retos que te llevan a trabajar mas duro.

– Volviendo al espectáculo, ¿qué aportan Los Makarines?

– Los Makarines junto a Daniel Jurado son el 50 % del espectáculo. Ellos aportan todo lo necesario para dejarse llevar bailando. Lo principal en un escenario es sentirse arropado por las voces y el toque. Tener la sensación de que somos muchos pero estamos todos compenetrados, todos a una.

– En su faceta como creador, ¿qué le inspira?

– Mi cabeza siempre está dando vueltas. Entonces tengo mi libreta cerca para anotar lo que se me ocurre a lo largo del día, luego le doy forma. Otro aspecto fundamental para mí es la música. Por suerte cuento con un buen equipo. Nos reunimos, explico mis inquietudes y de ahí creamos la musicalidad de cada espectáculo. Siempre aciertan a la primera. Por eso suelo decirles: “Siempre hacéis que me inspire y que mi imaginación fluya, así da gusto”.

– Ha dado usted prácticamente la vuelta al mundo. ¿Qué afición, ciudad, teatro… le trae mejores momentos?

– Te podría decir muchos, porque en cualquier parte del mundo la afición es fiel. Pero por destacar, me quedo con la afición de Japón. Son muy respetuosos con el arte. Como ciudad, Nueva York, que nunca duerme y siempre me deja con ganas de más. Recuerdo con cariño el Teatro Sant Margarete en Viena (Austria), donde recibimos a 5.000 personas todos los días durante dos meses. O el Royal Opera House (Londres), en el que coincidí con Tamara Rojo en el mismo cartel. En ese teatro se respira arte.

– ¿Existe cantera?

– Existe ilusión. Existe talento. Pero no hay compañías para crear cantera. Todos son proyectos de formato pequeño que no dan facilidades para poder formar una compañía grande, donde se genere y se forme a bailarines.