Pedro Carrasco ‘Niño Jero’ nace en Santiago (1954), en Jerez de la Frontera, en una familia de arte y compás capitaneada por su padre Manolito Jero. Pronto comienza a acompañarlo a las fiestas de la época en ventas y bodegas, donde estaban Tío Borrico, Juanata o El Troncho, con una guitarra “con un boquete” a cuestas. No le gustó desde nunca dedicarse a ello, pues a él le apasionaba cantar, pero su padre no le dio opciones y consiguió instalarse como promesa entre los jóvenes de su generación. Ahí estaba Moraíto, “mi hermano”, con quien comenzó a pasearse por los tablaos madrileños. Su estilo es conocido en el mundo entero por el compás, por sus falsetas contagiosas de ritmo y alegría, felicidad pura. Ahora ha preferido dejar los escenarios para que continúe la saga su hijo Manuel, aunque prepara un disco a modo de despedida con grandes colaboraciones que por ahora no se puede contar. A finales de mayo parece que se conocerá este trabajo que prepara junto a su hijo Luis. En pocas palabras: Periquín, “genio y figura”.

«Su estilo es conocido en el mundo entero por el compás, por sus falsetas contagiosas de ritmo y alegría, felicidad pura» 

El guitarrista Periquín Niño Jero, durante la entrevista con Juan Garrido en el Restaurante Damajuana, Jerez.