Home / Bordonazo NEW  / Ricardo Miño, Pepa Montes y Pedro Ricardo Miño: una familia flamenca

Ricardo Miño, Pepa Montes y Pedro Ricardo Miño: una familia flamenca

Décimo capítulo de EL LOCO DEL FLAMENCO: serie audiovisual de Manuel Bohórquez. Una carta personal y animada charla con la familia flamenca compuesta por el guitarrista Ricardo Miño, la bailaora Pepa Montes y el pianista Pedro Ricardo Miño.


Queridos Pepa, Ricardo y Pedro Ricardo:

 

No es fácil que un crítico y un artista expuesto a sus juicios tengan una buena relación. Pero en este caso se da y reconozco públicamente que siempre he tenido un trato exquisito por vuestra parte y que he intentado corresponderos con respeto y admiración. El flamenco es un arte donde el concepto de la unión familiar es casi la base de todo. En sus orígenes, nuestro arte vivía entre familias gitanas y no gitanas, de Triana, Cádiz, Jerez de la Frontera, Utrera, Lebrija o el Puerto de Santa María.

 

En Triana había tres o cuatro familias gitanas que sentaron las bases del arte de lo jondo en el arrabal sevillano a mediados del siglo XIX. Eran los Puya, los Pelao, los Cagancho y los Fillo. Todavía se hacen sus cantes y sus letras. No eran profesionales del arte, sino herreros, alfareros, tablajeros o taberneros, que fueron conservando durante generaciones una forma de cantar, bailar y tocar la guitarra, que vino evolucionando durante años y que hoy es un verdadero tesoro de cultura andaluza.

 

Siglo y medio después, un trianero y una vecina de Las Cabezas de San Juan formasteis una hermosa familia flamenca de las más conocidas de este arte.

 

Estimada doña Josefa Bastos Otero, Pepa Montes. Habría que rebuscar mucho en los baúles de la historia del flamenco para encontrar a una bailaora tan completa, profesional y con tanto arte. Bailas desde niña, desde que aquella Josefina Montes que pulía el Maestro Juanito Díaz soñaba con que sus brazos se elevaran algún día por encima del piquito de la Giralda.

 

 

«Usted, doña Pepa Montes, es una elegida del baile. Un monumento a la elegancia y el pellizco, a la profesionalidad y el arte sencillo, y a la vez difícil, de transmitir la estética de la danza andaluza más jonda»

 

 

Si llegar a ser una primera figura del baile es difícil, mantenerse durante décadas es algo reservado solo a los elegidos. Usted es una elegida del baile, estimada maestra. Un monumento a la elegancia y el pellizco, a la profesionalidad y el arte sencillo, y a la vez difícil, de transmitir la estética de la danza andaluza más jonda.

 

Triana no fue nunca tierra de guitarristas, aunque los hubiera y los haya muy buenos. Era más un arrabal que cantaba y bailaba. Pero cuando la Niña de los Peines se fue de los escenarios por última vez, en 1949, vino al mundo en la calle Pagés del Corro de Triana Ricardo Miño Álvarez, uno de los grandes profesionales de la guitarra flamenca de las cinco últimas décadas.

 

 

Ricardo Miño y Pepa Montes, en su domicilio de Sevilla. Foto: perezventana

 

 

Usted, don Ricardo, que llegó a acompañar a los más grandes del cante y el baile, desde Pepe Marchena a Antonio Mairena y desde Trini España a Manuela Vargas, es posiblemente el guitarrista más vocacional de su tiempo. Solo hay que entrar en su casa para ver cómo adora a ese pozo con viento, en vez de agua, que para el poeta Gerardo Diego era la guitarra.

 

 

«Usted, estimado maestro Ricardo Miño, ama el arte flamenco como a su vida misma, lo que le ha llevado a tener una obra musical, en solitario, de las más flamencas»

 

 

Maestro en la difícil faceta de acompañar al cante y el baile, creador de piezas de concierto y, por encima de todo eso, maestro en el más estricto sentido de la palabra. Maestro no es solo el que enseña, sino también el que ama lo que conoce. Y usted, estimado maestro, ama el arte flamenco como a su vida misma, lo que le ha llevado a tener una obra musical, en solitario, de las más flamencas, aunque no sea de las más conocidas.

 

Fruto del amor entre ustedes, Pepa y Ricardo o Ricardo y Pepa, nació vuestra mejor obra: Pedro Ricardo Miño Bastos, sin lugar a dudas el pianista más flamenco del mundo. Un modelo de hijo, de músico, de artista y de persona. Una obra de la que cualquier padre, o madre, se sentirían orgullosos.

 

Es un honor ser amigo de los tres, de esta familia tan bien avenida y tan sencilla. Que Dios os bendiga.

 

 

→  Ver aquí las otras entregas de la serie El Loco del Flamenco, de Manuel Bohórquez.

 

 

Ricardo Miño y Pepa Montes, durante la entrevista con Manuel Bohórquez para Expoflamenco. Foto: perezventana

 

 


Arahal, Sevilla, 1958. Crítico de flamenco, periodista y escritor. 40 años de investigación flamenca en El Correo de Andalucía. Autor de biografías de la Niña de los Peines, Carbonerillo, Manuel Escacena, Tomás Pavón, Fernando el de Triana, Manuel Gerena, Canario de Álora...

NO COMMENTS

ESCRIBE TU COMENTARIO. Rellena los campos NOMBRE y EMAIL con datos reales. Para que se publique en nuestro portal, el comentario no puede ser anónimo.

X